A la fecha existe evidencia científica de que el cannabis puede ayudar en el tratamiento de diversas enfermedades, pero la falta de difusión y educación se mantiene. Se trata de un tema que sigue siendo sensible, pues aún existen posiciones encontradas sobre los efectos que puede tener en la salud. Lo cierto es que está demostrado que un uso adecuado e informado sobre las dosis y vías de administración, tanto por el lado del médico que lo prescribe como del paciente que lo usa, permite aprovechar sus beneficios.
La sensibilidad y el miedo sobre su uso solo se erradicará con información, siendo responsabilidad del Estado fomentar primero la investigación y el uso informado. Además, también está en sus manos ejecutar las medidas necesarias que permitan que en el mercado existan productos de calidad, de empresas nacionales y extranjeras, que compitan.
Cada vez más países se suman a la despenalización del uso del cannabis con fines medicinales y terapéuticos. El Perú es uno de ellos, que en el año 2017 aprobó la Ley que regula el uso medicinal y terapéutico del Cannabis y sus derivados, Ley No. 30681, con la que se hace posible el uso informado, la investigación, la producción, la importación y la comercialización del cannabis y sus derivados destinados exclusivamente para fines medicinales y terapéutico, ley que fue reglamentada recién en el 2019, con el Decreto Supremo No. 005-2019-SA. Esto ha sido un primer y gran paso, pero aún falta mucho camino por recorrer.
Las entidades involucradas en su implementación son Ministerio de Salud, quien, a través del INS, tiene la responsabilidad de implementar las políticas necesarias para fomentar la investigación, y, a través de la DIGEMID, tiene la responsabilidad de velar porque los productos para uso medicinal y terapéutico del cannabis y sus derivados sean eficaces, seguros y de calidad. El Ministerio de Salud también es responsable de realizar campañas educativas y de sensibilización a la población sobre el uso informado.
A la fecha el INS ha emitido un reporte con las patentes que existen de cannabis. Por su parte, desde diciembre la DIGEMID cuenta con un aceite de CBD que se agotó rápidamente, y ha otorgado el registro sanitario del medicamento SATIVEX, aunque todavía no se encuentra disponible en el mercado. El acceso para los pacientes todavía es limitado, quienes siguen accediendo a opciones del mercado informal sin garantías de calidad.
También intervienen en estos temas el Ministerio de Agricultura, a través de SENASA, quien es el responsable de velar por que la importación de semillas para el cultivo cumpla con los criterios y condiciones sanitarias y fitosanitarias (evitando el ingreso de plagas), y, a través del INIA es el responsable de controlar el material genético de las variedades de cannabis cultivadas en el país.
