El pontífice emérito se mantiene en constante vigilancia por los equipos médicos y acompañado por su secretario, el alemán Georg Gänswein
Este jueves, el jefe de prensa del Vaticano, Matteo Bruni, informó que el papa emérito Benedicto XVI, se encuentra “lúcido pero grave de salud”.
La dirección de comunicaciones informó de la situación en un breve comunicado sobre la salud de Ratzinger.
“El papa emérito logró reposar la noche, está totalmente lúcido y en alerta, su salud es delicada, pero la situación de momento es estable”, indica la nota.
Señala: “Hay que acompañarle en estas horas difíciles”.
Francisco alertó sobre la situación del pontífice emérito en la audiencia general de este miércoles.
Allí pidió “una oración especial para el papa Benedicto XVI, que en el silencio está sosteniendo la iglesia” y se encuentra “muy enfermo”.
Tras esas palabras, Bruni emitió una primera nota de prensa para confirmar que en las últimas horas se había producido “un agravamiento” de su estado.
Esta afección de salud, según el Vaticano, se debe a su edad avanzada, pero no dieron detalles de la condición.
Según algunos medios, Benedicto XVI rechazó ser trasladado a un hospital desde el monasterio Mater Ecclesiae.
Asimismo, se mantiene en constante vigilancia por los equipos médicos y acompañado por su secretario, el alemán Georg Gänswein.
Según el diario italiano La Stampa, el pontífice emérito está “respondiendo positivamente al tratamiento”.
Su vida en el Vaticano
Desde el 2 de abril de 2013, Joseph Ratzinger vive rodeado de su “familia” vaticana, formada por un secretario y cuatro mujeres laicas.
Estas últimas se reparten las tareas de la casa y se ocupan de las necesidades del papa emérito.
Benedicto XVI, es el primer papa en renunciar al pontificado desde tiempos de Gregorio XII, a principios del siglo XV.