En los últimos años, el sector de los juegos de azar ha experimentado un crecimiento exponencial tras la aparición y popularización de los casinos online, así como de los teléfonos móviles compatibles con todo tipo de software que facilita a sus usuarios el disfrute de este tipo de actividades. Pese a esta revolución tecnológica que ha facilitado el éxito de plataformas digitales como la de JackpotCity, lo cierto es que el modelo de casino físico sigue trayendo incontables beneficios a las localidades en las que estas se emplazan.
3 beneficios que aportan los casinos a la economía local
En los siguientes apartados vamos a explicarte en detalle cuáles son, exactamente, los 3 beneficios que aporta la llegada de un casino a la economía local:
Pago de impuestos
Las salas de juegos físicas, ya sean casinos o casas de apuestas, pagan impuestos del mismo modo que lo hacen infinidad de negocios diferentes abiertos al público. Por ello, dichos negocios pagan Impuesto al Valor añadido sobre sus ingresos y beneficios, así como los correspondientes al personal que trabaja en las salas. Por ello, la cantidad de dinero generada en cualquiera de estos negocios para la economía local es bastante considerable. Recordar, además, que algunos de estos negocios también están gravados por impuestos especiales establecidos por los gobiernos y, por ello, se incrementan los ingresos obtenidos de los mismos.
Ingresos indirectos
A la hora de analizar los beneficios económicos que aportan este tipo de negocios, también hemos de tener en cuenta los efectos sobre su entorno. A la hora de acudir a casinos, las personas suelen requerir de viajes con alojamiento en hoteles, así como disponer de establecimientos en los que comer o disfrutar de una buena bebida. Así, a la hora de analizar el impacto económico de los casinos tenemos que tener en cuenta también los negocios de la zona, los cuales también pagan sus impuestos, generan empleo e ingresos para el Estado y para las entidades locales.
Efectos en el paisaje social y cultural
Este impacto que provocan los casinos y las casas de apuestas va más allá de la economía, dando lugar en algunos casos a auténticos cambios en el paisaje social y cultural que generan un impacto bastante positivo en el turismo. Se percibe, así, un gran impulso en el desarrollo de infraestructuras turísticas y de servicios gracias al fomento del arte y de la cultura que facilitan este tipo de negocios por medio del patrocinio de eventos, espectáculos y festivales.
Si bien la llegada de negocios locales relacionados con el sector de los juegos del azar puede traer numerosos beneficios a nmivel local, estos no estarán exentos de desafíos. El crecimiento del juego puede conllevar problemas relacionados con la adicción al juego, así como tener efectos sociales negativos tales como el aumento en la desigualdad y el crimen. Es por ello fundamental que las ciudades y países trabajen duramente e implementen políticas adecuadas que contribuyan a mitigar estos riesgos y garanticen, a su vez, que la industria del juego contribuya positivamente a la sociedad.
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