El movimiento hutí de Yemen informó este martes que su fuerza naval logró hundir por completo el buque Eternity C, que navegaba rumbo al puerto israelí de Umm al-Rashrash (Eilat). La acción, según detallaron en un comunicado oficial, fue ejecutada con un bote no tripulado y seis misiles, tanto balísticos como de crucero.
Tras el ataque, comandos especiales hutíes desplegaron una operación de rescate para asistir a varios miembros de la tripulación, a quienes brindaron atención médica y trasladaron a un lugar seguro. Todo el operativo fue documentado en video y audio, y difundido posteriormente por canales vinculados al grupo.
Los hutíes justificaron la ofensiva señalando que la empresa propietaria del buque había reanudado sus operaciones comerciales con puertos israelíes, desobedeciendo lo que calificaron como una “prohibición explícita” emitida por Yemen. “Cualquier nave que mantenga vínculos con Israel será considerada objetivo militar”, advirtió el grupo.
En ese sentido, las autoridades yemeníes aseguraron que el Eternity C había ignorado advertencias previas emitidas por la Marina hutí, antes de ser blanco del ataque. Reiteraron además que continuarán bloqueando todo tráfico marítimo con destino a Israel tanto en el mar Rojo como en el mar Arábigo.
Horas después, los hutíes publicaron otro video, esta vez mostrando el ataque y hundimiento del granelero Magic Seas, de bandera griega, ocurrido el pasado 6 de julio a unos 94 kilómetros al suroeste del puerto de Hodeidah, en la costa occidental de Yemen.
Con estos ataques, el grupo insurgente endurece su ofensiva naval en una de las rutas comerciales más sensibles del mundo, intensificando la presión sobre compañías navieras internacionales que continúan operando con Israel.