Caminar es una de las actividades físicas más accesibles y sencillas de incorporar a la rutina diaria; no requiere equipo especial, ni habilidad técnica, y puede realizarse en cualquier lugar.
Esta actividad física ayuda a mantener el peso corporal y mejora la función muscular, reduciendo el riesgo de enfermedades graves como diabetes tipo 2, cáncer y enfermedades cardiovasculares.
Según un estudio reciente publicado en el British Journal of Sports Medicine, caminar a una velocidad moderada puede tener efectos beneficiosos a largo plazo. La velocidad ideal es de 4,8 km/h, lo que corresponde a una caminata ligera pero constante, esta velocidad puede proporcionar los beneficios más relevantes para la salud y la longevidad.
Beneficios para la Salud
La actividad física regular, como caminar, mejora la circulación sanguínea, reduce la presión arterial y fortalece el corazón, lo que reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares; caminar a un ritmo moderado es una de las maneras más efectivas de mantener un peso saludable y controlar el azúcar en sangre, factores clave para prevenir la diabetes tipo 2.
La clave para aprovechar los beneficios de caminar es hacer de esta actividad un hábito diario y se recomienda caminar al menos 150 minutos a la semana, lo que equivale a unas dos horas de caminata al día.
Puedes distribuir este tiempo a lo largo del día, por ejemplo, caminando 30 minutos por la mañana, 30 minutos al mediodía y 30 minutos por la tarde.
Caminar es una actividad física accesible y beneficiosa para la salud. Incorporar caminatas a tu rutina diaria puede ayudarte a mantener un peso saludable, mejorar la función muscular y reducir el riesgo de enfermedades graves.