El expresidente Ollanta Humala, de 62 años, se convirtió este martes en el tercer exmandatario que recibe el penal de Barbadillo, en Ate, en donde se encuentran recluidos los exmandatarios Alejandro Toledo y Pedro Castillo.
Humala (2011-2016) fue condenado a 15 años de cárcel efectiva por el delito de lavado de activos en el caso de los aportes ilegales al Partido Nacionalista para sus campañas del 2006 y 2011.
Este recinto, que fue diseñado para albergar al fallecido Alberto Fujimori, se ha convertido en el centro de reclusión para los expresidentes peruanos.
Toledo, quien gobernó de 2001 a 2006, fue condenado en octubre de 2024 a 20 años y 6 meses de prisión por colusión y lavado de activos. La justicia determinó que Toledo recibió 35 millones de dólares en coimas de la constructora corrupta brasileña Odebrecht a cambio de la Carretera Interoceánica.
En tanto, Castillo, presidente desde 2021 hasta su vacancia en diciembre de 2022, fue arrestado en flagrancia por un intentar dar golpe de Estado. Desde entonces, se encuentra en prisión preventiva en el penal de Barbadillo, mientras enfrenta cargos por rebelión, conspiración y corrupción.
Otro que podría correr la misma suerte es el expresidente Martín Vizcarra, quien afronta un juicio por haber recibido 2.3 millones de soles en coimas, cuando fue gobernador regional de Moquegua, de las empresas Obrainsa e ICCGSA, a cambio de los proyectos Lomas de Ilo y el Hospital de Moquegua, respectivamente.
