Columna publicada en el diario Expreso.
El fujimorismo (mejor dicho, el keikismo) apoyó, sin miramientos, la designación de José Jerí como presidente del Congreso, siendo parte, incluso, de la Mesa Directiva que el legislador de Somos Perú encabeza, con la participación de Fernando Rospigliosi como primer vicepresidente, cuya presencia da cierta tranquilidad (el inteligente Fernando ha tenido que tragarse varios sapos, seguramente, al aceptar ser parte de esta nómina), pero no es suficiente para acallar las alarmas encendidas por tener a un vizcarrista hasta el tuétano como titular del Legislativo para el periodo 2025-2026.
En las elecciones del 2021, José Jerí expresó en redes sociales su “apoyo absoluto” a Martín Vizcarra, calificando de “golpistas” a quienes vacaron al ‘Lagarto’, quien, posteriormente, fue inhabilitado por haberse vacunado a hurtadillas con sueros anticovid de Sinopharm y no pudo asumir como congresista, con lo que Jerí ocupó el puesto dejado por Vizcarra. “Este 11 de abril demuestra tu repudio hacia este Congreso, vota por el 1 (Martín Vizcarra) y 3 (José Jerí) de Somos Perú para el Congreso”, escribió el ahora titular del Parlamento aquella vez.
Fuerza Popular no aprendió la lección después de que Martín Vizcarra, que ha hecho de la traición una forma de vivir, siéndole infiel hasta a su esposa, Maribel Díaz, disolviera ilegalmente el Parlamento, de mayoría naranja, en el año 2019.
Para llegar a la Presidencia, Vizcarra se reunió a escondidas con Keiko Fujimori varias veces, traicionando así a Pedro Pablo Kuczynski. Luego, con la asesoría del argentino Maximiliano Aguiar, hizo lo mismo con Fujimori.
A la par, Daniel Salaverry se casó con el ‘Lagarto’, traicionando a la lideresa de FP, y el resto es historia conocida: ambos acabaron postulando a la Presidencia y Parlamento, respectivamente, por Somos Perú.
Tengo mucho respeto por algunos cuadros de Fuerza Popular, pero no puedo dejar de manifestar que es una total necedad haberse sumado a la lista de José Jerí, tomando en cuenta los antecedentes mencionados líneas arriba, y no haber respaldado al legislador José Cueto, que cuenta con una trayectoria de vida impecable.
Jerí, a su vez, afronta una gravísima denuncia por violación sexual, además de que, desde que asumió como congresista, aumentó su patrimonio en 1000 % (pasó de unos S/100 mil a más de S/1 millón). Por si fuera poco, recientemente, la empresaria Blanca Ríos ha confesado que le entregó hasta 150 mil soles en coimas al hoy titular del Congreso, a través de personas vinculadas a él, para sacar adelante una obra de riego en Cajamarca.
En simple, el keikismo le entregó la Presidencia del Parlamento a Martín Vizcarra, sacrificando a Rospigliosi, enemigo acérrimo del ‘Lagarto’.
Otrosí: Mi pleno repudio a la dirigencia de Avanza País, que, por cobardía, dejó sin piso a la valiente Olenka Zimmermann, uno de sus mejores cuadros para el siguiente Congreso.