¿Por qué algunas personas parecen encontrar a su «media naranja» con facilidad mientras otras siguen esperando? La respuesta, según un estudio psicológico reciente, está en las motivaciones ocultas que impulsan la búsqueda del amor.
Investigadores de universidades en Estados Unidos y Canadá analizaron a más de 3.000 adultos solteros de entre 18 y 39 años. A través de un cuestionario de 24 puntos, identificaron seis tipos de motivación que mueven a las personas a buscar pareja. Luego, seis meses después, evaluaron quiénes lograron establecer una relación satisfactoria.
Las 6 motivaciones que definen cómo (y si) encuentras pareja
- Motivación interna
Personas que disfrutan el compromiso por sí mismo. Ven las relaciones como algo enriquecedor, divertido y natural. - Identificación
Buscan pareja porque consideran que estar en una relación es algo importante y con sentido personal. - Interiorización positiva
Ven tener pareja como una forma de validación personal. Les sube la autoestima demostrar que pueden estar con alguien. - Interiorización negativa
Tienen miedo a la soledad. Sienten que sin pareja son un fracaso o no valen lo suficiente. - Motivación externa
Buscan pareja para agradar a los demás. Les importa cómo los ven sus amigos, familia o sociedad. - Desmotivación
No tienen interés real en una relación. No aspiran a encontrar pareja ni ven valor en hacerlo.
¿Y quiénes tienen más éxito?
Los resultados del estudio fueron claros:
Las personas con motivación interna y de identificación fueron las que encontraron pareja más rápido y con relaciones más estables.
En cambio, quienes buscaban pareja por miedo al rechazo o por presión social (interiorización negativa y motivación externa), tuvieron menos éxito en su búsqueda.
La clave: conocerse antes de amar
Los expertos coinciden en algo: si no entiendes por qué quieres estar con alguien, será difícil construir una relación sana y duradera.
“La conciencia de nuestras motivaciones es la base del éxito romántico”, concluye el estudio.
Así que antes de lanzarte al mundo del romance, pregúntate: ¿qué me impulsa a buscar pareja?
La respuesta puede cambiar tu destino amoroso.