Lo que debía ser una noche tranquila terminó con gritos, amenazas y angustia. Dos delincuentes armados irrumpieron violentamente en un chifa ubicado en la transitada avenida Rosa Toro, en el distrito de San Borja, y en cuestión de segundos desataron el caos entre trabajadores y clientes.
Los ladrones encañonaron al vigilante del local, mientras que una trabajadora, en un intento desesperado por evitar el robo, lanzó su celular a los asaltantes, sin lograr disuadirlos. Los criminales se llevaron el dinero de la caja registradora y despojaron a los comensales de billeteras, celulares, relojes y otras pertenencias. Varios de los presentes estaban acompañados de niños, lo que agravó el pánico vivido durante el ataque.
Los vecinos, hartos de la inseguridad, exigieron una respuesta firme de las autoridades. “Necesitamos seguridad urgente”, reclamó un comerciante. Otro vecino fue más tajante: “Parece que los delincuentes tienen más derechos que nosotros. Esto tiene que cambiar”.
La propietaria del local, visiblemente afectada, confirmó que este no ha sido un hecho aislado. “Hace dos días también asaltaron otro chifa por aquí. Estamos muy golpeados. Por ahora, el restaurante no abrirá”, declaró.
Las cámaras de seguridad captaron todo el accionar de los delincuentes. Aunque usaban capuchas, algunos rasgos y detalles físicos quedaron registrados. Además, un tercer cómplice los esperaba en un auto fuera del local, cumpliendo funciones de campana.
La Policía ya tiene en su poder los videos y ha iniciado las investigaciones. Vecinos y comerciantes de la zona piden mayor presencia policial, pues aseguran que los asaltos en esta parte del distrito se están volviendo cada vez más frecuentes.
