El contralor general César Aguilar Surichaqui inició una jornada de supervisión en la región Tacna para verificar el estado de importantes obras públicas que impactan directamente en los servicios de salud, educación, saneamiento y vías urbanas, con el fin de garantizar que los recursos del Estado se empleen de manera correcta y en beneficio de la ciudadanía.
Durante su visita, el titular de la Contraloría recorrió cinco proyectos emblemáticos que presentan retrasos, deficiencias o riesgos de inoperatividad, pese a la alta inversión comprometida.
“Nuestra prioridad es que cada sol invertido en obras públicas se traduzca en servicios de calidad para la ciudadanía. No vamos a permitir que la paralización y las deficiencias sigan afectando a la población”, sostuvo César Aguilar.
Hospital Hipólito Unanue
La obra para mejorar los servicios del Hospital Hipólito Unanue, ejecutada por el gobierno regional, cuenta con una inversión superior a S/ 632 millones y registra un avance físico de apenas 40.85 %, aunque ya se ejecutó el 77 % del presupuesto. La construcción está paralizada desde marzo del 2020 y presenta graves problemas estructurales.
Uno de ellos son los 135 aisladores sísmicos y 35 deslizadores que son dispositivos que se instalan en la base de una estructura, como edificios o puentes, para protegerlos de los efectos destructivos de los terremotos.
Esta obra no cumple con el Reglamento Nacional de Edificaciones, situación que prolonga su paralización desde hace cinco años. Ante esta realidad, Aguilar Surichaqui destacó su preocupación por la población tacneña ya que hay millones de soles invertidos en algo que no se ha usado nunca por lo que aseguró plantear las medidas necesarias para destrabar la obra en cuestión.
Infraestructura temporal del Hospital (IOARR)
La instalación prefabricada implementada durante la pandemia para ampliar la atención hospitalaria, valorizada en más de S/ 44 millones, fue entregada a EsSalud en 2020, pero actualmente se encuentra en abandono, con filtraciones, restos de aves y equipos electromecánicos deteriorados. Esta situación compromete la bioseguridad y la sostenibilidad de la inversión.
Planta de Tratamiento de Agua Potable de Calana
La nueva planta de agua potable, con un costo actualizado de S/ 158 millones, se encuentra en etapa de puesta en marcha. Sin embargo, presenta deficiencias como eflorescencias en estructuras, ausencia de dosificadores de contingencia para insumos químicos y cerco perimétrico insuficiente, lo que pone en riesgo la operatividad y la seguridad de la infraestructura.
Institución Educativa Guillermo Auza Arce
El proyecto para modernizar este colegio, cuyo costo supera los S/ 45 millones, se paralizó tras la resolución del contrato por controversias con el contratista dejando un avance del 68 %. Actualmente, se elabora el expediente técnico de saldo de obra, mientras el arbitraje continúa, lo que retrasa el acceso de cientos de estudiantes a mejores condiciones educativas.
Mejoramiento de pistas y veredas en Leoncio Prado
La obra municipal por más de S/ 13 millones registra un avance físico de solo 26.7 % y enfrenta problemas tras la resolución del contrato por incumplimientos del consorcio ejecutor. En la zona intervenida se observan conexiones de desagüe expuestas, buzones sin seguridad y acumulación de desmonte, lo que representa riesgos para la salud y la seguridad vial.
De esta manera, Aguilar Surichaqui reafirmó su compromiso con la vigilancia del correcto uso de los recursos públicos, especialmente en obras prioritarias que brindan derechos fundamentales como la salud, educación y el acceso al agua potable.