Locales

Hasta 10 años de cárcel podría recibir conductor que arremetió con su camioneta contra restaurante en La Molina

Exdecano del CAL advierte que podrían imputarse los delitos de tentativa de homicidio y daños materiales

El caso de Miguel Ángel Requejo Astochado, el hombre que el pasado 2 de julio estrelló su camioneta contra el restaurante El Charrúa, en La Molina, dejando a tres personas heridas, sigue generando repercusiones legales. Según el abogado César Bazán, exdecano del Colegio de Abogados de Lima, el agresor podría enfrentar hasta 10 años de prisión si se confirma la comisión de los delitos de daños materiales y tentativa de homicidio.

En conversación con Andina al Día, Bazán precisó que en este caso se configuran dos delitos claramente diferenciados: los daños al local comercial y el intento deliberado de causar daño a las personas que se encontraban dentro. “No fue un accidente. Hubo intención. El sujeto sabía que había personas dentro del restaurante y dirigió el vehículo hacia ellas de manera directa. Esa acción tiene que considerarse como intento de asesinato. Además, el impacto provocó una serie de destrozos que también deben ser sancionados como daños materiales”, indicó.

El abogado agregó que, aunque la pena estimada podría llegar hasta los 10 años, existe la posibilidad de que el Ministerio Público eleve la gravedad del caso si incorpora el agravante de “ferocidad”, lo que podría llevar la pena hasta los 15 años. “Por ahora, el caso está tipificado como alevosía, dado que el ataque fue sorpresivo. Sin embargo, en los videos se ve claramente que los comensales observaron cómo se acercaba el vehículo. Eso podría cambiar el análisis”, explicó.

Dosaje etílico en duda

Otro punto que genera controversia es el dosaje etílico practicado a Requejo. Según sus familiares, el resultado arrojó menos de 0.35 gramos por litro de alcohol en la sangre, lo que estaría por debajo del límite legal. Sin embargo, para el Dr. Bazán, eso no exime de responsabilidad. “No estaba en completo estado de ebriedad, pero sí hay indicios de que había consumido una cantidad significativa de alcohol. Si bien un resultado así podría reducir la pena, no la elimina. En este caso, dada la gravedad del hecho, debería aplicarse la sanción completa”, sostuvo.

¿Intento fallido?

Bazán también consideró que, al no haber víctimas mortales ni heridos de gravedad, la justicia debería aplicar una pena proporcional al intento frustrado. “Estamos ante una tentativa. No logró su objetivo, por lo que una condena de entre 5 y 10 años podría considerarse razonable”, puntualizó.

Actualmente, Miguel Ángel Requejo se encuentra internado en el penal Ancón II, cumpliendo una orden de prisión preventiva por nueve meses, mientras el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) define en qué establecimiento terminará cumpliendo esta medida. Según la resolución del Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de La Molina, Requejo permanecerá recluido desde el 3 de julio de 2025 hasta el 2 de abril de 2026, mientras continúan las investigaciones.


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