Varios pueblos de la península de Kamchatka, en Rusia, amanecieron cubiertos por una densa capa de ceniza negra luego de que el volcán Kliuchevskaya Sopka —también llamado Kliuchevskói— expulsara material volcánico hasta 10 kilómetros de altura este domingo.
Imágenes difundidas en redes sociales muestran carreteras, vehículos y viviendas completamente oscurecidos, mientras la ceniza continúa cayendo y acumulándose en toda la zona. Según las autoridades, la nube se desplaza hacia el este-noreste, en dirección al mar de Bering, atravesando varias localidades en su recorrido.
Este episodio se produce pocos días después del potente terremoto de magnitud 8,8 registrado el 30 de julio frente a las costas de Kamchatka, que provocó un tsunami en el Pacífico y alertas en Japón, Estados Unidos y Filipinas. El sismo desplazó la península cerca de dos metros y generó un notable incremento de la actividad volcánica en la región, donde actualmente cinco volcanes permanecen activos, según el Ministerio Regional de Emergencias.
