Ucrania está en guerra con Rusia, y aún así, en este marco de destrucción, el gobierno de Donald Trump aplicó aranceles a un país que clama ayuda para hacer frente al ejército ruso.
Es así que Yuliia Svyrydenko, la ministra de Economía de Ucrania, dijo que los últimos aranceles de la administración Trump probablemente serán «difíciles, pero no críticos» para la economía de su país.
Svyrydenko expresó así su esperanza de negociar condiciones más favorables con Estados Unidos.
Donald Trump, dio a conocer el pasado miércoles 2 de abril una amplia lista de «aranceles recíprocos», imponiendo un arancel mínimo del 10% a todos los países, que incluye también a Ucrania, con tasas aún más altas para los principales socios comerciales como la UE.Las
exportaciones de Ucrania a EE. UU. en 2024 ascendieron a 874 millones de dólares, incluyendo 363 millones en hierro fundido y 112 millones en tuberías, según informó Svyrydenko.
Ese mismo año, Ucrania importó productos estadounidenses por valor de 3.400 millones de dólares.
Los productores ucranianos venden más de 600 categorías diferentes de productos a Estados Unidos, según a ministra.
«Nuestros aranceles sobre los productos estadounidenses son bastante bajos: la tasa sobre los automóviles es del 10%, sobre el carbón y el petróleo, del 0%», dijo Svyrydenko.
«Por lo tanto, ahora tenemos la oportunidad de acordar condiciones diferentes. La declaración estadounidense indica claramente esa posibilidad», señaló, añadiendo que los aranceles afectarán con mayor fuerza a los pequeños productores.
El mes pasado, la administración Trump impuso aranceles del 25% a todos los productos de acero y aluminio importados a Estados Unidos, aunque estos productos y otros metales estaban exentos de aranceles recíprocos.
La producción de acero es un sector clave de la economía de Ucrania y la segunda fuente de divisas después de la agricultura.
Unos 60 países o bloques comerciales se vieron afectados por aranceles adicionales superiores al nivel base del 10%, incluidos la UE (20%), China (34%) y Taiwán (32%).
Rusia, Bielorrusia y un puñado de otros países fueron exentos de la lista, y la Casa Blanca argumentó que las sanciones existentes impuestas a estas naciones ya «impiden cualquier comercio significativo».
