En un contexto de creciente presión y condena internacional por la crisis humanitaria en la Franja de Gaza, el ministro israelí de Patrimonio, Amichay Eliyahu, aseguró que Israel “avanza a toda velocidad para arrasar Gaza” y que el enclave “será completamente judío”, según declaraciones recogidas por The Times of Israel.
Durante una entrevista con la emisora Kol Barama, el funcionario —miembro del partido ultraderechista Otzmá Yehudit— afirmó: “Gracias a Dios, estamos erradicando este mal. Estamos empujando a una población educada en ‘mi lucha’”. Sus palabras generaron rechazo tanto en sectores de la oposición como en el propio primer ministro Benjamín Netanyahu.
Eliyahu sostuvo que “toda Gaza será judía”, aunque matizó que los árabes leales a Israel serían tolerados. “No somos racistas”, afirmó, “luchamos contra quienes nos combaten”. También anunció que Gaza será desalojada para permitir la construcción de nuevos asentamientos israelíes y que las futuras ciudades no estarán «aisladas en cantones».
Negó, además, que exista una crisis alimentaria en la región, calificando las denuncias de hambruna como parte de una “campaña contra Israel”. “No hay hambre en Gaza”, aseguró. “Y aunque lo hubiera, no nos corresponde a nosotros preocuparnos por eso. Que lo haga el mundo”.
Las declaraciones de Eliyahu se producen en un momento especialmente delicado, mientras organismos internacionales alertan del colapso humanitario en el enclave palestino y crecen los cuestionamientos a las acciones del gobierno israelí.