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Jerry Adler, recordado por The Sopranos fallece a los 96 años

El actor Jerry Adler, reconocido por su papel como Hesh Rabkin en The Sopranos y con una extensa trayectoria detrás y sobre los escenarios de Broadway, murió a los 96 años. Su familia confirmó el fallecimiento el sábado a través de la Capilla Conmemorativa Riverside en Nueva York.

Antes de brillar en la pantalla, Adler acumuló más de 50 producciones en Broadway como director de escena, productor y director, trabajando junto a figuras como Marlene Dietrich, Julie Andrews y Richard Burton. Formaba parte de una familia profundamente ligada al teatro: su padre, Philip Adler, fue gerente general del Group Theatre, y su prima Stella Adler se convirtió en una de las maestras de actuación más influyentes del siglo XX.

A los 60 años, cuando pensaba en retirarse, encontró un nuevo rumbo en la actuación. Su primer gran papel llegó en la película The Public Eye (1992), junto a Joe Pesci. Desde entonces, inició una carrera frente a las cámaras que se extendió por más de tres décadas. Participó en series como Northern Exposure, Rescue Me, The Good Wife, Transparent y Broad City, además de películas como Manhattan Murder Mystery de Woody Allen.

Su consagración llegó con The Sopranos, donde interpretó a Hesh Rabkin durante las seis temporadas de la aclamada serie de David Chase. Lo que inicialmente iba a ser un cameo se convirtió en un papel recurrente gracias a la buena recepción del personaje.

En paralelo, Adler regresó a Broadway —ahora como actor— en obras como Taller Than a Dwarf (2000) y Fish in the Dark (2015), escrita y protagonizada por Larry David.

Lo hago porque lo disfruto realmente. No sabría qué hacer si estuviera jubilado”, dijo en una entrevista en 2015. “Mientras me sigan llamando, seguiré trabajando”.

En 2024 publicó sus memorias, Too Funny for Words: Backstage Tales from Broadway, Television and the Movies, donde repasó anécdotas de sus décadas en el teatro y la televisión.

En sus últimos años, Adler y su esposa, Joan Laxman, regresaron a Nueva York, la ciudad que marcó el inicio y el final de su vida artística. En una entrevista concedida al New York Times en 1992, resumió con ironía lo que significaba para él verse en pantalla tras una vida tras bambalinas:

Soy inmortal”, dijo entonces.


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