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Cristian Rivero no pudo tener una hija con Gianella Neyra por una importante razón: «Me arrepiento»

La relación que el actor Cristian Rivero mantiene con su pareja y colega Gianella Neyra es, sin duda, una de las más sólidas en el mundo del espectáculo, tanto así que nunca se han expuesto públicamente en medio de problemas o enfrentamientos. Esta vez, el artista revela su lado más íntimo y cuenta por qué no pudo cumplir su sueño de tener una hija.

Cristian Rivero se arrepiente por no tener una hija con Gianella Neyra

¡Lo cuenta todo! El exconductor de «Esto Es Guerra» se sincera, por primera vez frente a cámaras, sobre sus deseos de tener una familia más grande con su pareja Gianella Neyra, con quien tiene una relación sentimental desde hace más de 10 años, formando un hogar alejado de los escándalos mediáticos.

«Todas esas cosas complicadas de la crianza, del bebé cuando recién nace, la mala noche, que se enferma, te las olvidas. Yo cuando quise uno más, quería una mujercita, ya fue muy tarde, me animé muy tarde», reveló Cristian Rivero con un rostro que reflejaba lamentar no haber tomado la decisión en el mejor momento de sus vidas.

Cabe resaltar que pese a que no tener más hijos, la pareja ha demostrado que es feliz con su familia: «Debo confesar que me arrepiento, me hubiese gustado tener una mujercita. Somos dos en casa y dos varones en casa, me hubiera gustado tener a mi princesita y Gianella me dice ‘Por algo pasan las cosas’», dijo en una entrevista en su canal de YouTube.

Cristian Rivero revela que decidió ser padre gracias a Gianella Neyra

Cristian Rivero se convirtió en padre junto a su pareja Gianella Neyra, quien cuando iniciaron su relación, ya era madre de un niño de tres años, pero juntos armaron su hogar sin problemas y tuvieron un hijo más, quedándose con dos herederos en su familia. Él contó que antes le atemorizaba no ser buen padre, pero su pareja lo ayudó.

“Tomé la decisión porque llegó Gianella a mi vida. Hasta antes, sí no lo tenía muy mapeado, no estaba muy seguro y me daba mucha ansiedad… ¿Y si no le puedo dar lo que yo quiero, y si tiene necesidad?, me pasaba de vueltas. Llega Giane y me dice que no es tan complicado: ‘Vamos, muchacho’, y ya”, recordó.