Para cualquier marca, construir una buena reputación ya no depende solo de una campaña publicitaria o de tener presencia digital. Hoy, el posicionamiento sostenible se logra conectando directamente con los actores del ecosistema al que se pertenece. En ese contexto, participar en eventos especializados, como ferias, congresos o encuentros sectoriales, es una estrategia que va más allá de lo comercial: es una oportunidad para generar confianza, educar al consumidor, formar comunidad, fortalecer vínculos y escuchar de primera mano lo que el mercado necesita.
Además, en sectores con un constante crecimiento, como el de las motos en el Perú, estos espacios permiten a las marcas mantenerse relevantes, demostrar conocimiento técnico y asumir un rol activo en la evolución de su industria.
Ese es el camino que tomó Castrol en Perú, al volver este 2025 al Expomoto, el principal evento del rubro motero en el país. Para la compañía, esta participación responde a una visión clara: estar donde están los usuarios, los técnicos, los distribuidores, y toda la comunidad motera, reforzando así su posicionamiento y compromiso con el mercado nacional.
“Participar en eventos como Expomoto es una oportunidad para dialogar directamente con quienes sostienen el mercado: técnicos, motociclistas, negocios pequeños y emprendedores. En ese intercambio se construye marca, se gana confianza y se captan insights clave para el negocio”, afirmó Angelo Hatzidimos, Country Manager de Castrol Perú-Colombia-Ecuador.
Un dato clave para entender el contexto de las motocicletas en el Perú, según Gestión, el costo de mantenimiento de una moto de baja o media cilindrada puede ser hasta un 75% menor al de un auto. Además, los repuestos en estos modelos suelen ser más económicos y accesibles
Dentro de estos espacios, las marcas también aprovechan para fortalecer sus estrategias comerciales, acercando al público sus productos más representativos. Ese fue el caso de Castrol, que presentó su línea de lubricantes Power 1, pensada para quienes buscan máximo rendimiento, aceleración y una experiencia de manejo más potente.
“Estamos ante un parque más exigente. Hoy, los lubricantes ya no son un insumo más, son un componente vital. Un buen lubricante puede marcar la diferencia en la durabilidad del motor, en el consumo y en la experiencia de conducción. Por eso creemos que esta exposición es el momento perfecto para educar, conversar y seguir posicionando la importancia de elegir productos de calidad”, añadió Hatzidimos.
Aprovechando la presencialidad del evento y el contacto directo con la comunidad motera, la marca también reforzó su apuesta por la formación técnica al promover el programa “Súper Técnicos”, una iniciativa que busca capacitar y certificar a mecánicos de motocicletas en todo el país. Con ello, Castrol no solo apunta a fortalecer su posicionamiento comercial, sino también a contribuir con el desarrollo del ecosistema técnico que sostiene al sector.