Un fuerte escándalo golpeó este jueves a la Comisión Nacional de Árbitros (CONAR), luego de que su cuenta oficial de Instagram fuera intervenida y difundiera un video con graves acusaciones contra Agustín Lozano, presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF).
El material, eliminado minutos después, mostraba a tres supuestos árbitros peruanos —con el rostro cubierto y sin revelar identidad— quienes afirmaron sentirse “secuestrados” por Lozano desde 2018. Entre las denuncias señalaron manipulación en los ascensos arbitrales y un uso político del sistema de arbitraje para consolidar poder en futuras elecciones de la FPF.
“Él y su junta directiva deciden quién asciende y quién no”, se escucha en la grabación.
También se denunciaron presuntas irregularidades económicas: deudas de hasta 15 mil soles con árbitros, pagos incumplidos año tras año y una directiva de la CONAR “designada a dedo”, incluyendo a una integrante que, según dijeron, aspira a un puesto en el directorio de la FPF.
Horas después, la CONAR se pronunció mediante un comunicado en el que afirmó que su perfil fue víctima de un hackeo y que el contenido no representa la postura institucional. Además, anunciaron acciones legales para identificar a los responsables del ataque.
Este hecho se suma al clima de críticas y cuestionamientos que rodea a la gestión de Agustín Lozano, especialmente por la falta de transparencia en los procesos internos del fútbol peruano.