Fuerzas del orden refuerzan la seguridad en terminal aéreo
Un panorama desolador se aprecia esta mañana en el aeropuerto Inca Manco Cápac de la ciudad de Juliaca tras la violenta jornada de protesta registrada ayer cuando un grupo de manifestantes atacó este terminal aéreo y se enfrentó a las fuerzas del orden que resguardan esa infraestructura.
El cerco perimétrico del aeropuerto de Juliaca, que recientemente había sido rehabilitado después de los daños ocasionados hace unas semanas, se encuentra totalmente destruido.
Las operaciones aeronáuticas de este terminal se encuentran suspendidos desde hace más de un mes y no existe una fecha probable de reinicio de actividades.
A esta hora, personal de la Policía Nacional y miembros del Ejército del Perú han reforzado la seguridad en el perímetro del aeropuerto Inca Manco Cápac. Se conoce que para hoy se han anunciado nuevas movilizaciones en Juliaca.
El tránsito en la zona se encuentra restringido y el panorama de la vía que comunica el terminal aéreo con la ciudad es desolador por los daños causados por los vándalos. Cientos de manifestantes atacaron con piedras, palos y otros objetos a las fuerzas del orden en su intento de tomar el aeropuerto. El enfrentamiento dejó 28 policías y 22 civiles heridos.
Desaguadero
De otro lado, se informó que el ingreso de decenas de militares a la ciudad de Desaguadero, en la provincia puneña de Chucuito, provocó desazón entre los comuneros de dicha localidad fronteriza, y obligaron a que se retiren al considerar como un acto de provocación del gobierno.
Los manifestantes tomaron la principal vía de acceso hacia la localidad de Desaguadero y evitaron que los militares avancen, además de pedirles a que se retiren de la zona.
En un video difundido en las redes sociales, uno de los militares trató de calmar a los comuneros, “Nuestra presencia acá, no es tener un conflicto con ustedes; es imposible. Nosotros somos un pueblo como ustedes y servimos a esta nación”.
En otro momento, afirmó que la presencia militar en la zona seria parte de la acción de protección de la frontera, “vamos a verificar nuestra frontera, no la suya”, se pronunció el militar en tono enérgico, lo que provocó el rechazo de los comuneros.
Los manifestantes exigieron a los miembros del Ejercito abandonar la localidad de Desaguadero, incluso algunas personas se atrevieron a señalar ser parte del territorio de Bolivia, “nos acusan de ser bolivianos y lo somos”, fueron algunas expresiones desatinadas.
Ante esta situación, los militares se retiraron por uno de los cerros aledaños, donde la presencia de personal civil dentro del contingente militar, causó malestar entre los comuneros e intentaron retenerlos para su identificación.
Por momentos, los ánimos se calderón al registrarse conatos entre la turba y personal militar, registrándose disparos al aire a fin de disuadir a los manifestantes, finalmente los civiles retenidos fueron rescatados por los militares.
Cabe señalar, que desde el miércoles; se encuentran los militares en la zona, que conjuntamente con el personal policial realizan acciones de desbloqueo de la carretera binacional, para restablecer el tránsito.
