Una mujer peruana fue arrestada en la isla de Bali, Indonesia, luego de que las autoridades descubrieran que intentaba introducir 1.4 kilos de cocaína, parte de los cuales estaban escondidos en un juguete sexual que llevaba dentro de su cuerpo, según informó la Policía local.
La detenida, de 42 años y cuyas iniciales son N.S., había llegado el pasado 12 de agosto al aeropuerto internacional de Bali en un vuelo procedente de Catar. Su comportamiento despertó sospechas entre los agentes de aduanas, quienes solicitaron apoyo policial para realizar una inspección más exhaustiva.
“Durante la revisión se encontraron 1.4 kilos de cocaína ocultos en un juguete sexual introducido en su cuerpo, además de varias pastillas de éxtasis”, explicó Radiant, jefe de la Unidad Antinarcóticos de la Policía de Bali, en conferencia de prensa.
De acuerdo con la investigación, la peruana admitió que había sido reclutada a través de la dark web por un hombre al que conoció en abril, y que le ofreció 20.000 dólares por trasladar la droga a Indonesia.
Un país implacable frente al narcotráfico
Indonesia es conocida por su mano dura contra los delitos de drogas, con penas que pueden llegar a la ejecución por fusilamiento. Actualmente, más de 90 extranjeros esperan en el corredor de la muerte tras haber sido sentenciados por tráfico de estupefacientes.
En julio, un tribunal de Bali condenó a siete años de cárcel a una ciudadana argentina que intentó introducir 244 gramos de cocaína escondidos en su vagina. La última ejecución por este tipo de delitos se produjo en 2016, cuando fueron fusilados un indonesio y tres ciudadanos nigerianos.