El Perú da un paso decisivo en la lucha contra el cáncer de cuello uterino. El Ministerio de Salud (MINSA) incorporó la vacuna nonavalente contra el virus del papiloma humano (VPH) al Esquema Nacional de Vacunación, una dosis capaz de prevenir nueve variantes del virus, responsables del 90 % de los casos de cáncer de cuello uterino y otros tumores asociados.
La medida se oficializó mediante la Resolución Ministerial N.º 440-2025/MINSA, publicada el pasado 18 de julio. La decisión permitirá que niñas, niños y adolescentes hasta los 18 años reciban la vacuna de forma gratuita en colegios, centros de salud y campañas comunitarias.
Un paso clave frente a la principal causa de muerte oncológica en mujeres
El cáncer de cuello uterino sigue siendo la primera causa de muerte por cáncer en mujeres peruanas, superando al cáncer de mama. Según el informe Reducir la brecha de equidad: Atención oncológica para la mujer en Perú de Economist Impact, en 2022 se registraron 2,545 fallecimientos por este tipo de cáncer, en comparación con 1,951 por cáncer de mama.
El estudio advierte que la enfermedad afecta con mayor frecuencia a mujeres jóvenes, de bajos ingresos y residentes en zonas rurales o comunidades indígenas, donde la vacunación enfrenta mayores dificultades de acceso.
Acceso seguro y sostenible
Gracias a su inclusión en el Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Perú podrá adquirir la vacuna nonavalente a menor costo y con disponibilidad garantizada, ya que todas las dosis cuentan con certificación de calidad de la OMS.
Karla Ruiz De Castilla, directora de la asociación de pacientes Esperantra, destacó que “esta decisión del MINSA marca un avance fundamental para reducir la desigualdad en prevención oncológica. Garantizar que la vacuna llegue a quienes más la necesitan es clave para salvar vidas”.
Cómo acceder a la vacunación
Población objetivo: niñas, niños y adolescentes de hasta 18 años.
Puntos de vacunación: centros de salud, colegios y campañas comunitarias.
Recomendación: llevar DNI y carné de vacunación para registrar las dosis.
Con la incorporación de esta vacuna, el país refuerza su estrategia de prevención primaria contra el cáncer de cuello uterino, avanzando hacia una cobertura más equitativa y efectiva para las poblaciones más vulnerables.