El presidente del Consejo de Ministros, Eduardo Arana, se refirió a la tensión diplomática generada luego de que la presidenta Dina Boluarte calificara a Bolivia como un «país fallido» durante su más reciente mensaje a la Nación. La declaración causó malestar en las autoridades bolivianas, quienes manifestaron su preocupación a la cancillería peruana.
Arana señaló que el Gobierno ha recibido pronunciamientos tanto del encargado de negocios de Bolivia en Perú como del diplomático peruano en Bolivia. De acuerdo con el premier, se explicó a ambos representantes la naturaleza del mensaje emitido por la mandataria.
El titular de la PCM precisó que no se ha producido un diálogo directo entre los presidentes de ambos países. Pese a la tensión, aseguró que las gestiones diplomáticas continúan y que la relación bilateral está siendo encauzada mediante los canales institucionales correspondientes. Arana enfatizó que las comunicaciones buscan tranquilizar la situación y retomar la relación a través de las vías diplomáticas establecidas.
«Evidentemente, lo que hemos recibido es la preocupación del encargado de negocios de Bolivia aquí en el Perú, y evidentemente también del encargado de negocios del Perú en Bolivia, con quien se ha explicado la naturaleza de este mensaje y esa situación. […] La relación con Bolivia está nuevamente retomándose. Está en los carriles diplomáticos y por estos se tiene que conducir”, mencionó.
