Una investigación liderada por el Boston College (EE.UU.) y publicada en la revista Nature Human Behaviour ha confirmado lo que muchos empleados intuían: reducir la semana laboral a cuatro días mejora notablemente la salud física y mental de los trabajadores, así como su productividad.
El estudio analizó los casos de 2.896 empleados de 141 empresas en EE.UU., Canadá, Reino Unido, Irlanda, Nueva Zelanda y Australia. Estas compañías aplicaron semanas laborales de cuatro días, reduciendo las horas semanales de 39 a 34 horas, sin recortar los salarios. Sus resultados se compararon con los de otras 12 empresas que mantuvieron la jornada tradicional de cinco días.
Más bienestar, menos agotamiento
Después de seis meses de evaluación, los empleados que trabajaron cuatro días a la semana reportaron:
- Mejor salud física y mental
- Mayor calidad del sueño
- Menor fatiga
- Más ejercicio
- Mayor control de su tiempo
- Menor agotamiento laboral
Además, también aumentó la satisfacción laboral y la percepción de productividad, lo que refuerza el vínculo entre bienestar y desempeño.
Jornadas más intensas, pero más efectivas
Aunque a nivel individual se redujo el estrés, a nivel organizacional algunas exigencias aumentaron. Esto se debería, explican los autores, a que las jornadas de trabajo se volvieron más intensas para cumplir los mismos objetivos en menos días.
Aun así, muchas empresas encontraron formas más eficientes de operar, eliminando reuniones innecesarias y simplificando procesos.
“Los cambios en las horas de trabajo son un factor significativo para el bienestar, en especial en lo relacionado al agotamiento y la satisfacción”, concluye el informe.
Limitaciones del estudio
El estudio también reconoce algunas limitaciones:
- Las empresas participantes se postularon voluntariamente, lo que puede generar sesgos.
- La mayoría eran pequeñas y de países de altos ingresos.
- Las empresas del grupo de control estaban concentradas en EE.UU. y eran mayoritariamente organizaciones sin fines de lucro.
- El periodo de observación fue de solo seis meses.
Por ello, los investigadores recomiendan más estudios a largo plazo y con muestras más diversas para validar los resultados.
Un nuevo estándar laboral en camino
Pese a las limitaciones, los hallazgos sientan un precedente importante en el debate global sobre la jornada laboral. Reducir el número de días trabajados sin afectar el salario no solo es posible, sino que trae beneficios tangibles para trabajadores y empresas.