Este domingo 20 de julio, el Perú celebra con entusiasmo el Día del Pollo a la Brasa, uno de los platos más queridos del país.
Se estima que más de 32 millones de personas lo consumirán hoy, consolidando su lugar como ícono gastronómico nacional. Sin embargo, el placer de este manjar también plantea preguntas sobre sus efectos en la salud.
¿Es malo comer pollo a la brasa? La respuesta es clara: no, si se consume con conciencia; así lo afirma la licenciada Bettyna Benavente, nutricionista del Hospital Guillermo Almenara, quien resalta que este plato no está reñido con una alimentación saludable, siempre que se cuide la frecuencia, cantidad y los acompañamientos.
Recomendaciones para un consumo saludable:
- Sustituir las papas fritas por opciones al horno o cocidas.
- Agregar ensaladas frescas ricas en fibra.
- Limitar el uso de salsas como mayonesa o vinagreta.
- Ajustar la porción de pollo según talla, peso y nivel de actividad física.
“No es lo mismo una persona de 1.50 m que otra de 1.80 m. Las necesidades calóricas varían y hay que tenerlo en cuenta para evitar el sobrepeso”, advierte Benavente.
¿Y si tengo diabetes, hipertensión o problemas renales?
La especialista indica que sí se puede disfrutar de este plato en esos casos, pero con precaución y bajo supervisión profesional. Las recomendaciones incluyen:
- Hipertensos: reducir sodio, evitar salsas, más verduras sin aderezos.
- Diabéticos: limitar carbohidratos (como papas), aumentar la fibra.
- Pacientes renales: porciones menores de proteína, más vegetales y menos sal.
También sugiere alternativas caseras como preparar el pollo a la brasa en horno o usar freidoras de aire para las papas.
“No se trata de dejar de comer, sino de hacerlo adecuadamente”, afirma.
Hoy, más que privarse, se trata de celebrar con conciencia. Compartir en familia, conocer nuestras necesidades nutricionales y disfrutar responsablemente es posible y necesario.